domingo, diciembre 09, 2007

Palabras para la historia

Habla para que
yo te conozca

Sócrates (470-399 a.C.)
Filósofo griego

No hay dudas de que el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, se enriquece con las nuevas palabras que van surgiendo y que son de uso común en las personas y culturas que hablamos el español. Los diccionarios de los respectivos países se nutren de las palabras autóctonas de cada uno de ellos. Es importante señalar que incluso entre regiones de un mismo país hay palabras que son obscenas para un lugar y para los otros no. Siga leyendo.

Sin embargo, en estos últimos 9 años de gobierno, el vocabulario revolucionario nos ha dejado estupefactos con el uso de algunas palabras que por su composición lucen incorrectas a todo evento y que solo son aceptadas, patentadas y hasta justificadas por los aduladores de oficio que siempre existen y existirán en los entornos más cercanos a los gobernantes de turno. En las revoluciones hay como sorgo. Lean bien y saquen sus propias conclusiones.

1.- En una clase magistral que facilitaba a un grupo de niños en edad escolar el comandante/presidente, en cadena nacional de radio/tv y con la presencia de su mismísimo ministro de educación, éste ante lo mirada estupefacta de los venezolanos comenzó a conjugar el verbo ADQUERIR. Los niños no interrumpieron al distinguido educador y mucho menos el ministro. Los primeros por desconocimiento (Fueron a aprender) y el segundo para no poner (Se imagina uno) su cargo en peligro y fue después de tanto sudar y buscarle las mil y una vuelta lingüística que el adorado líder del proceso revolucionario reconoció que estaba en error. ¡Uffffff fue la exclamación nacional!

2.- En un acalorado debate que escenificaban los honorables diputados de la soberana Asamblea Nacional y donde estos, como cosa curiosa, hacían una ardorosa defensa del proceso revolucionario, cuya sesión convirtieron en un grotesco torneo por demostrar quién manejaba mejor el vil oficio de la adulación, el diputado Ismael García, puntero en esas lides, soltó esta perla: “Esta revolución es INDEVOLVIBLE”. ¡Obvio! En la revolución vale todo y ellos que son de PODEMOS, todo lo pueden. El mecate continúa en el mismo lugar.

3.- Cuando el Presidente Chávez, presentó la propuesta de reforma constitucional, ante la soberana Asamblea Nacional para su discusión, consulta, aprobación y posterior sometimiento a un referéndum aprobatorio, muchos calificados y destacados juristas la consideraron inconstitucional y acudieron a la sala constitucional del máximo tribunal de la república donde introdujeron muchos recursos solicitando la nulidad de la propuesta, algunos fueron respondidos negativamente ajustados a la terminología jurídica y como eran tantos, el tiempo para la fecha del referéndum estaba encima, la flamante presidenta del TSJ despacho un gran número de un plumazo y con una sola palabra son: IMPROPONIBLES. Échele ganas y enriquezcan su vocabulario

4.- Una vez realizado el referéndum, proclamada oficialmente la irreversibilidad de la tendencia que negaba la reforma constitucional, han surgido muchos comentarios y como la imaginación vuela, cada quien tiene una versión de los hechos sucedidos esa larga noche e inicio de la madrugada. Un diario de circulación nacional publicó una crónica donde trasluce que el Presidente se negaba a aceptar los resultados y fue el alto mando militar quien bajo presión lo obligo a reconocer la realidad adversa. ¡Ardió Troya! La cúpula militar convocó una rueda de prensa para desmentir esa versión y el ministro de la defensa para graficar muy bien la situación dijo en clara e inteligible voz que el Presidente Chávez es: IMPRESIONABLE para dejar claro que el jefe de estado no acepta presión. Los niños inocentemente llaman a los castillos que inflan en las fiestas infantiles INFLAMABLES. Y como todos llevamos nuestro niño interiormente, somos proclives a las inocentadas. Dejémoslo de ese tamaño.

5.- El Presidente Chávez que abruptamente se presentó en esa rueda de prensa, tomó la palabra, puso en duda los resultados del NO y dijo que si seguían contando seguro ganaba el SI por poquito margen y que el no quería una victoria tan ajustada, volvió a recomendar a la oposición que administraran muy bien su pirrico triunfo y se le salió esta escatológica frase: “Han obtenido una VICTORIA DE MIERDA” ¿? La gran mayoría de los venezolanos pegaron el grito al cielo. No daban crédito a lo que veían y escuchaban. Era el mismísimo Presidente en horario protegido por la ley RESORTE, que su mismo gobierno impulso, aprobó y puso en vigencia, que la violaba flagrantemente y no tenía excusas de ningún tipo para dirigirse a sus adversario de esa manera tan canallesca y ruin ¡Se volvieron a equivocar! Salió en su defensa nada más y nada menos que el Ministro de Comunicación y echando mano de la novela de Gabriel García Márquez “El coronel no tiene quien le escriba” en cuyo texto utilizó la palabra soez, gruesa y obscena, nos ilustró dejando claro que la palabra “MIERDA es patrimonio cultural del país” no se agarre de nada me llevo la brocha, la escalera, el tobo con la pintura y el mecate lo tiene ocupado este flamante ministro. ¡Una guará! poseemos un patrimonio cultural fabuloso y lo ignorábamos. Cuando adquiera el precio del petróleo no habrá país en el mundo con unas reservas probadas equiparables a las nuestras, seguiremos exportando materia prima a los países industrializados y nuestros ingresos en divisas no sufrirán ninguna merma. Que siga la fiesta.
6- El hoy flamante miembro del Tribunal Supremo de Justicia como premio por su pasantía impecable por el Consejo Nacional Electoral a favor de la revolución que lidera el presidente Chávez, fue tan transparente, equilibrado, imparcial y ecuánime en sus actuaciones al frente del organismo comicial que ante la pregunta de un periodista con relación a las dudas que – con muchísimas rezones – abrigaba el sector de la oposición antes del referéndum revocatorio contestó sin inmutarse que el proceso se realizaría en el marco de la mayor TRAMPARENCIA cuestión que resultó tan cierta que a los sectores opositores no se les permitió representación en las mesas electorales, en las juntas electorales municipales y los resultados los divulgó entre gallos y media noche a favor del gobierno. Como les quedó el ojo. ¿TRAMPARENTE?
Son palabras para la historia y que seguramente la Real Academia de la Lengua Española, estará considerando incluir cuando se actualice y publique la próxima edición de su diccionario. Concluyentemente, hay que oírlos hablar para conocerlos mejor.