sábado, agosto 07, 2010

Personajes de mi pueblo: Cruz Humberto Mejías Campos

Del trabajo del obrero nace la grandeza de las naciones
León XIII (1810-1903)
Papa católico

El trabajo dignifica. No importa la tarea que se realiza. Hay labores que son peligrosas, rústicas y las cuales requieren mucho cuidado, gran esfuerzo físico y mucha responsabilidad. Alguien tiene que hacerlas. Cruz Mejías, que nació en El Tigre el 22 de octubre de 1948 y es hijo del señor Humberto Mejías y Ramona Campos, él de San Joaquín y ella de Aragua de Barcelona, se dedicó desde muy joven a la reparación y montaje de neumáticos. Los padres cuando llegaron a estas tierras en 1938 se residenciaron en caserío El Caris y luego, buscando la educación de sus hijos Pedro, Delia y Cruz, se mudaron al incipiente pueblo de El Tigre y, establecieron su morada familiar, en la Calle Orinoco. Gente del campo con sentido de superación. Hay que mejorar la calidad de vida.

En efecto Cruz Mejías, inició sus estudios de primaria en el Grupo Escolar Estado Trujillo, luego curso el básico en el Liceo Alberto Carnevali y culminó su bachillerato en el Liceo Pedro Briceño Méndez, alcanzando el título de Bachiller Mercantil – mención Contabilidad. Eran tiempos difíciles desde el punto de vista económico, lo que obligaba al adolescente a trabajar y estudiar, lo cual hacía en la Estación de Servicio Santa Cruz de don Pedro Obando, dónde se inicio. Más tarde, logró empleo en la Estación de Servicio Massobrio, que para ese entonces, arrendaba el señor Pompilio Persichetti, quien tenía un contrato con la Industria Petrolera para hacerle servicio a una buena parte de su flota de vehículos y el cual incluía en una de sus disposiciones el montaje, revisión y reparación de neumáticos. No viajó para ingresar a la universidad y se quedó en ese trabajo con Pompilio por espacio de 16 años. El necesario trabajo lo ancló. Cuando la troja está alta hay que ponerle corazón.

Una vez que el señor Pompilio Persichetti, entregó la Estación de Servicio, para fundar una venta, distribución y cauchos de la prestigiosa marca Good Year, La sucesión Massobrio, que en este entonces lideraba el distinguido y exitoso empresario Italo Massobrio, le arrendó a José Rodríguez que la administró durante 2 años en las mismas condiciones. El señor Rodríguez, obtuvo más tarde, la concesión de la bomba de gasolina que está en la entrada de San Tomé y cuando hizo entrega formal, le regaló a Cruz Mejías, todo el equipo e implementos que se requiere para la el montaje y reparación de neumáticos. La sucesión Massobrio, no arrendó más y asumió la administración directa de la Estación de Servicio, renovó el contrato con la Industria Petrolera y lo referente al servicio de neumáticos quedó en manos de Cruz, bajo la condición de que, los dividendos obtenidos por ese servicio, se repartiera en partes iguales. 5 años trabajó fifty fifty, cesó el contrato y Cruz, se quedó atendiendo su clientela particular en esas instalaciones que gentilmente y, quizá por la consecuencia demostrada, le ceden gratuitamente la sucesión Massobrio, ahora conducida y gerenciada por el Dr. Stefano Massobrio. Allí, trabaja por su cuenta y riesgo. Una vida dedicada al oficio.

Cruz Mejías, recuerda que cuando se inició como “Cauchero” el señor Paolo D’ Rienzo, que tenía en concesión la histórica Bomba Primavera y que fue demolida arbitrariamente y violando todos los derechos humanos, materiales y económicos de la sucesión Massobrio, por el atorrante que nos desgobernó en el municipio hasta el 23N-2008, conoció al señor Eugenio Medina que junto a él, fueron los pioneros en el oficio y luego se fueron incorporando Jesús “Chúo” Mago (+), polifacético joven que se caracterizó por su corpulencia y era conocido indistintamente como “El pollo” o sencillamente “Mata hombre” apodo que le acuñó nuestro amigo y excelente beisbolista Sigfrido “pipío” Rodríguez (+) José “Cheo” Méndez, que se inició en bomba de gasolina La confianza de don Vico Tesio ubicada en la calle Guayana, exactamente dónde edificaron el centro comercial que alberga la tienda MARKA y Ramón Antonio “El Negro” Figuera, socios que hoy trabajan en la actual sede de la Estación de Servicios La Confianza, en la avenida Rotaria, José “El Rojo” Sulbaran que tiene sus equipos en las 4 vías, Isaías “Chimpa” Matute que está ubicado en la carretera Negra La Flint en la entrada de Villa Rosa, Henry Ortiz, que presta servicio en la Calle Falcón y Teodoro Camacho (+) quien tenía una buena clientela en la esquina de la Calle Nueva Esparta con Florida. Estos hombres que son pioneros en la reparación de neumáticos han incorporado nuevos equipos y mejorado sus técnicas. En materia de neumáticos son la referencia obligada en la ciudad.

En aquel tiempo, reparar cauchos de gandolas, maquinaria pesada y especialmente de los Tornapool, era una tarea altamente peligrosa, utilizaban para tal fin palancas de acero, picos y mandarria y, cualquier descuido les podía costar la vida. Más de uno, lamentablemente, dejó lo sesos en los aros que refuerzan la seguridad de esos cauchos en los rines. Un pestañeo y volaba con mucha fuerza el aro de seguridad. Había que tener destreza, fuerza, nervios de acero, experticia y sobre todo un cuidado extremo. Era época de equipos rudimentarios y con ellos había que sacar el trabajo. El que quiere y necesita puede y se arriesga. La necesidad obliga.

Cruz Mejías, también cumplió el servicio militar obligatorio. Cuando cursaba segundo año, hizo una pausa en sus estudios y se alistó en el ejército, dónde pasó 24 meses. 18 en Maracay y 6 en Naguanagua, egresó con el rango de Cabo Primero y reemplazante de Pelotón, también ha cumplido con el ciclo vital de la evolución. ¡Multiplicaos! Cruz, no perdió tiempo y posee 10 hijos. Elaine, Yursenia, Mairabis, Maricruz, Rosalba, Julián, Marianis, Yanina, Cruz Humberto y Jesús Humberto, 11 nietos y el rancho ardiendo, me dice mirando a su actual pareja Yesenia Mago. Todos criados, formados y sostenidos con el trabajo que desempeña desde siempre y para siempre como Cauchero, el cual todavía ejerce en el área de servicio de la Estación de Servicio Massobrio ubicada al frente de Campo Oficina.

Estos obreros con su trabajo duro, rústico, digno y muy útil, han contribuido y contribuyen silenciosamente con el desarrollo integral y grandeza de nuestra pequeña urbe y, por ende, de la nación. Igualmente han sacado, sacan y sacarán a más de un conductor de un gran aprieto cuando tiene un percance con un neumático. En el caso de nuestro personaje Cruz Mejías, al mismo tiempo, debemos hacer mención, que de igual forma dedicación, empeño y disposición ha jugado y juega un papel importante en las luchas reivindicativas de los vecinos. Es uno de los fundadores del movimiento vecinal en la ciudad al lado del líder de FACUR José Albornoz Carvajal (+) y su inseparable compañero de luchas Alberto José “Beto” Vásquez, el popular “Albays”. Cruz con su sensibilidad, vocación de servicio y voluntad de trabajo para buscar que la calidad de vida mejore en los sectores populares, se ha ganado un importante liderazgo en ese vital sector de lucha social, lo que le granjeado el respeto, aprecio y admiración de sus vecinos y buena porción de la comunidad. Un buen vecino, pues.

En estos humildes destellos buscamos destacar estos héroes anónimos que hacen vida en nuestro municipio, los cuales son protagonistas de nuestras historias urbanas, con la firme aspiración de que los eximios investigadores, historiadores y cronistas locales, cuando decidan escribir la verdadera historia de nuestra ciudad, los incorporen al disco duro de esa memoria histórica. Creo sinceramente que ¡Vale la pena! Todos son importantes. Nunca lo olvidéis.





1 comentario:

José Asdrúbal Castro Benítez dijo...

Estimado coterráneo.......
Mi nombre es José Asdrúbal Castro Benítez......Nací en San Tomé en 1.949, viví en El Tigre desde el '58, soy profesor jubilado, cuadripléjico a raíz de un accidente en aguas del río Guanipa, en el '67.....Tengo casi 9 años en España, 4 que no voy a Venezuela............La razón de esta presentación, es para que te - el tuteo sin autorización, lleva el máximo respeto, me es más fácil para comunicarme - hagas una idea de quién soy.....En segundo lugar, felicitarte y agradecerte el amor - no encuentro otra palabra más adecuada - y el profesionalismo que pones en cada escrito, el respeto al personaje de turno, algunos conocidos, y otros por referencia, que en definitiva, cada uno en su entorno, narran paso a paso, la historia y la idiosincracia de nuestro amado terruño.......Leer la Antorcha, forma parte de mi rutina diaria, y periódicamente me detengo en tus interesantes artículos, donde la memoria vuela al pasado, dando vigencia a aquello de que RECORDAR ES VIVIR.......Mi correo ya lo tienes en el encabezado.....También me puedes localizar por mi nombre completo en Facebook.............En nombre de muchos autoexiliados, que extrañamos nuestra Patria Chica, GRACIAS, MUCHAS GRACIAS.