viernes, marzo 02, 2007

Personajes de mi pueblo: Oito Lira

¿Cuál es el sueño de los que están
despiertos? La esperanza

Carlomagno “Carlos I, el grande (742-814)
Monarca germano.
Rumbo a la Copa América 2007. Venezuela por primera vez es anfitrión de tan magno evento y por vez primera abriga la esperanza de obtener el preciado galardón. El 26 de junio rueda el balón en San Cristóbal. La Vinotinto enfrenta a Bolivia uno de sus rivales del grupo A. José Oito Lira Rondón, nuestro personaje de hoy, oriundo del Casco Viejo de El Tigre, es hijo de José María Lira Reyes y Ana Margarita Rondón de Lira, ambos fundadores de la ciudad y vino al mundo un 05 de agosto de 1939 – anda en 69 la mejor edad del hombre – desde su niñez abrazó la pasión por el fútbol. Jugador, entrenador, director técnico, promotor, crítico y fanático empedernido del deporte que mueve más público en el mundo tiene en su haber en su larga y fructífera trayectoria en el mundo del balompié. Todo un señor en materia futbolística.

Inició sus pasos en ese bello, rudo y difícil deporte cuando asistía en calidad de fanático a los juegos y hasta a las practicas que se realizaban en Campo Oficina, para ese entonces, la única cancha existente. Fue tanto su empeño que se metió como río en conuco y hoy forma parte de la galería exclusiva de los mejores y excelentes jugadores fútbol que ha producido El Tigre. Querer es poder. Oito Lira, lo quiso, pudo y lo logró.

José Oito Lira Rondón, estudio la primaria en la escuela “Cova Maza” que funcionaba en la calle Ricaurte, inició la secundaria en el Liceo Pedro Briceño Méndez, la cual abandonó para incorporarse al mercado laboral como ayudante de soldadura en el Taller Roma cuyo propietario fundador era Nicóla Fasciani. En los 3 años que trabajo en ese prestigioso taller, aprovechó sus tiempos libres e hizo cursos en el INCE. Manejo de Aceites, Bombero, Mecánico de Telar, luego se instaló en Puerto Ordaz y se empleo en un taller de latonería y pintura propiedad de Francisco “Chico” Moreno, desempeñándose como ayudante del pintor, oficial Orlando “Chivatón” Omaha que todavía no había pensado venir a El Tigre. No duró mucho tiempo ya que, en un intercambio futbolístico los visitó un equipo de Valencia que defendía los colores de la sastrería “Dandy” lo entusiasmaron para mudarse a la capital de Carabobo e incorporarse a un equipo y lo más importante, mientras le lograban empleo, todos sus gastos de alojamiento, alimentación y viáticos, corrían por cuenta del equipo para el cual jugara. No lo pensó dos veces y se marchó la capital carabobeña.

En Valencia llegó a la pensión Madrid, se integro al equipo “Mundifútbol” lo emplearon en la textilera “Pacifica” que funcionaba en Guacara, luego mejoró su status laboral cuando logró integrarse al staff de trabajadores de Papeles Venezolanos “PAVECA” donde laboró por espacio de 15 años, hasta que regresó a El Tigre. Muchas experiencias en los campos de fútbol del centro vivió intensamente José Oito Lira. Tenía la experiencia de haber participado en el equipo juvenil del Liceo Briceño Méndez bajo la tutela del Prof. Juan Facendo y donde destacaba jugadores de la talla de Nelson Bermúdez, el “Indio” Gómez, Enrique Sánchez, Luís Aníbal Velásquez, Luís La Roche, Rubén Guevara, Brigido Vicent, entre otros y de la oncena El Tigre FC que dirigió Guillermo González, quién a la sazón, era ebanista y fue el diseñador y fabricante de las puertas de la Iglesia Virgen del Valle y el Colegio Divino Maestro. Experimentado, con calidad, ganas de triunfar y las oportunidades que le brindaron en Carabobo y Aragua, completaron un cuadro exitoso.

Con el equipo CROACIA de Valencia fue tres veces campeón estadal. En esa triunfante oncena alienaban como regular 4 Tïgrenses más junto a él. José Vicente Lira Rondón, Nelson Durán, Ángel “Harris” Albert y Pablo Albert, también fue protagonista del equipo que obtuvo el campeonato estadal en representación de “PAVECA” y con el conjunto “Tenería El Puma” en la condición de entrenador y jugador obtuvieron el subcampeonato. No hay dudas que dejó una huella profunda en el fútbol carabobeño. En El Tigre, no fue menos prolija su cosecha de éxitos con los equipos en los cuales se desempeño. 3 veces campeón local con Casa Nueva Esparta, donde figuraban también Rachid Martínez, Sabi Aranaga, Samuel Reyes, Francisco “Camellito” Tirado, Luís “Culí” Martínez, José “Pegón” Fajardo, Manuel Barrios, entre otros, que todavía brillan en las categorías de veteranos y master. Todos esos campeonatos fueron disputados en primera categoría. En ese momento la calidad del fútbol era excelente y el nivel de preparación óptimo. Indiscutiblemente fue la época de oro del fútbol amateur en la ciudad.

En su largo trajinar por las canchas de fútbol del país José Oito Lira Rondón, recuerda que en una oportunidad, formando parte de la selección de Anzoátegui, viajaron a la capital para participar en los juegos nacionales y Bethermi “Culí” González, emocionado invitó a los compañeros de equipo “Vamos para el telegráfico” cuando en verdad quería decir el Teleférico. Una vez que cometió ese gazapo, lo dejaron de llamar Culí y le encasquetaron el apodo de “El telegráfico” y en una de esas salidas, el también componente de la selección Camilo Scribani, los invitó a La Vega a disfrutar de un buen Toddy. Cual sería la sorpresa cuando les estaban cobrando por cada unidad Bs. 3, montaron una protesta y le dijeron al dueño que en La Casa Nueva York de El Tigre, era de mejor calidad y constaban Bs. 0,50, además eran futbolistas y los viáticos que les suministraban era de Bs. 5 al día. El dueño de la fonda les replicó “Bueno, no paguen nada, pero se marchan ya de aquí” El que no llora no mama.

José Oito Lira Rondón, lleva el fútbol en la sangre. Junto a Alí Martínez, fundaron el Fútbolito en El Tigre. Armaron 8 equipos, hicieron un torneo en el campo de los Cachorros en Pueblo Ajuro, que para ese momento era pura arena, lo cual no fue óbice para que culminarán con éxito la aventura, se sembrara en el corazón de los niños y jóvenes el fútbolito y hoy es practicado masivamente en todos los rincones de la ciudad.

Otra cosa interesante, Oito Lira, asegura que, el fútbol entró al país por El Callao. La Isla de Trinidad era colonia de Inglaterra y la mayoría de los Callaoenses tienen raíces trinitarias y consecuencialmente fueron ellos en Venezuela los pioneros de ese versátil, masivo, interesante y emocionante deporte que hoy mueve millones de fanáticos y sumas mil millonarias de dinero. Estamos en el preámbulo de la Copa América. Salimos de la Serie del Caribe en materia beisbolística y entramos en la orbita del fútbol. Apostamos al éxito de la jornada, ligaremos a la Vinotinto, que gane el mejor y una vez que ruede el balón en San Cristóbal, seguiremos las incidencias de los juegos a través de la pantalla chica e invitaremos a José Oito Lira Rondón para que nos ilustre en cada jugada y nos comente las perspectivas de cada equipo en el torneo. Más sabe el diablo por viejo que por diablo.
Hay esperanza, es ahora o nunca. ¡Gol! De la vino tinto y se desata la locura. Los fuegos artificiales están asegurados para celebrar cada gol y cada triunfo. José “Nene” Hernández los garantiza desde su fábrica en Valencia. En la “Peña” nos vemos y el amigo “Pepe” que tiene monitores en todos los ambientes de la Tasca, con la amabilidad que les es proverbial, la eficiencia de su personal y calidad de sus comidas y bebidas completará un cuadro envidiable. Con Oito y Pepe que conocen en profundidad el juego del fútbol, no habrá detalle del juego que no disfrutemos y estoy seguro la pasaremos de órdago.





1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta muy bueno tu blog. te felicito muy buena informacion para los tigrenses